Una gran afluencia de publico y algunos niños interesados por esta labor, desconocida para muchos de ellos.
Una anécdota de la mañana fue una niña que por todo y por todo, quería hacerse una foto haciendo bolillos con su muñeca favorita.
Nos contó que tenia que llevar al colegio una foto para la seño y cuando nos vio en el parque le dijo a su madre que ella quería una foto haciendo bolillos para llevársela a la seño.
Le pusimos un cojín y le enseñamos a coger los bolillos, su padre se coloco enfrente y le hizo la foto. Tenia una sonrisa y una cara de felicidad...
Nuestra compañera y amiga nos trajo un tentempié, unes coques a la pala con chocolate y unos buñuelos, hecho por unas mujeres de La Romana que por cierto estaba riquisimo.
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